domingo, 17 de marzo de 2013


EDITORIAL.
UNA LUCHA CONTINUA
Durante seis años esperamos este momento con ansias, nada más, porque preparación en sí no hubo mucha, hay quienes están asustados porque a tan solo tres cortos meses un giro del destino descuidará su vida, algunos se justificarán  o buscarán culpables para camuflar su error. Al parecer la historia ya está contada, porque aún no ha llegado el momento y algunos, como cual excelente adivinos, leen el porvenir, sin miedo, siendo cómplices del destino, se creen con la capacidad y el derecho de amedrentar, aún sabiendo que nada esta escrito. No hay preocupación más grande que la prueba ICFES que para la poca suerte de la Prom 2013 fue adelantada un mes, lo triste del asunto es que muchos creen que con sólo asistir al curso Pre-Icfes lograrán fortalecer las debilidades, sobre todo de lectura, a la que por más de seis años estuvieron condenados.

Hace no muchos años, influenciada por el gran Jaime Garzón, que apropósito como cosa rara en este país, cumple 14 años de muerte, 14 años de impunidad, aprendí o más bien logré comprender que el estudio no lo es todo, es más, la educación colombiana es tan pésima que enseñan cosas realmente innecesarias, ya que lastimosamente algunos docentes y estudiantes no logran comprender que se debe educar para la vida y no para el momento, no pretendo salirme del tema defendiendo una visión de la educación que muchos reprochan, pero lo traigo al caso porque justamente en Pre-Icfes encontré un grupo de docentes conscientes de la situación, de la realidad, que también defienden mi postura, la cual muchos se niegan asimilar; pues bien, para mi sorpresa re-descubrí que el saber leer correctamente (teniendo conocimientos mínimos, lo que llamamos cultura general) hace de la prueba de estado, que no mide la inteligencia de una persona sino la comprensión, argumentación y proposición según cada materia del núcleo común, justamente lo que los instructores de Pre-Icfes nos inculcan cada sábado, por ejemplo, como identificar una pregunta y su componente, como leerla (factor importantísimo) como llegar a una posible respuesta y un sin número de tácticas propias de la prueba destruye o mejora vidas, como suelo llamarla.

Es ahí cuando me pregunto ¿perdí seis años de mi vida aprendiendo temas que ya ni recuerdo? Seis años que pude utilizar o en el que me debieron inculcar como leer, analizar, argumentar… Ya saben el resto. Lo peor del caso y cosa que me enfurece es que algunos docentes de manera sarcástica, como si no supiéramos identificar la ironía, hacen un dictamen de nuestro futuro, incluyendo lo que para ellos será nuestro posible puntaje cuando ni siquiera son capaces de entender que en vez de embutirnos conocimiento deberían enseñarnos a interpretar… (Ya saben el resto), por favor queridos docentes entiendan que a nosotros no se nos graba el embrollo de conceptos y cosas innecesarias y más cuando eres joven y en tu mente tienes cientos de prioridades, antes que el estudio.

Por lo visto se nos debería educar desde sexto para el ICFES, pues a decir verdad es lo único que en parte interesa, define nuestro futuro malo o bueno pero así es, nuevamente me pregunto ¿Por qué vemos música o religión? Estas no salen en la prueba de estado; luchar en contra de la idiosincrasia de algunos, es difícil y cambiarles el pensamiento mucho peor.

¡Ay Jaime… debes  estar revolcando en tu tumba al saber que la educación en este país no ha mejorado como tú querías! Hasta yo me confundo porque las opiniones están divididas (lo público y lo privado típico en este país), hay quienes no comprenden que primero que todo se debe enseñar a ser persona, porque gente hay mucha. Ojalá me  vaya bien en la prueba aunque tarde comprendí el error, ojalá la educación tome un giro imprevisto y logre darse cuenta de lo contradictoria que es, ojalá en nuestro colegio se instruya y prepare a los estudiantes para el Icfes desde sexto  y no aplicando pruebitas, ENSEÑANDO A LEER COMO DEBE SER.

Danna Ruiz Peña